"La espada rota" de Poul Anderson

La espada rota, Poul Anderson, Alianza editorial, col. 13 20, 2008

1954. Coincide en el tiempo la publicación de dos novelas de fantasía que se convertirían en sendos clásicos del género y en dos libros que definirían e influenciarían a buena parte de los escritores posteriores: La comunidad del anillo del profesor Tolkien y esta La espada rota de Poul Anderson. Dos relatos de fantasía épica que con sus diferencias, parten de una fuente común (la mitología nórdica) y marcarían las directrices de todo un género.

En una tierra en la que el reino de Faerie existe en una dimensión paralela a la del mundo de los hombres, Skafloc, el ahijado de los elfos, habrá de liberar la terrible maldición que pesa sobre Tyrfing, la poderosa espada rúnica que rompió Thor y que ahora vuelve a ser necesaria para salvar a los elfos en la guerra que mantienen contra los trolls. Además, en medio de este ambiente, Skafloc también habrá de enfrentarse a su propia sombra. Valgard, que ha ocupado su lugar en el mundo de los hombres.

Clásico de la fantasía escrito por un autor clásico del género y la ciencia ficción (suya es la muy interesante novela La nave de un millón de años). Apasionante historia que partiendo de las mismas fuentes mitológicas que la trilogía de Tolkien, lo hace desde una óptica muy diferente. Mientras que Tolkien apostaba por un marcado maniqueismo, Anderson humaniza a todos sus personajes, incluidos a los dioses, y no hay personaje noble capaz de llevar a cabo un acto abyecto, como un personaje malvado que en algún momento no mueva a compasión.

Skafloc y Valgard, héroe y villano, luz y sombra que se mueven y confunden continuamente a lo largo de la novela. Dos seres condenados desde un principio a un final inevitable por el egoísmo de esa raza eterna que es la elfa. Anderson parte de este mito del niño robado por los elfos (y que Goethe inmortalizó en su impresionante poema de El rey de los elfos), y lo mezcla con la mitología nórdica de Asgard, los gigantes, orcos, trolls y los dioses. Rastros de mitología japonesa, faunos griegos o demonios orientales. Un mundo mitológico de dioses antiguos que está desapareciendo por la cada vez mayor influencia de ese Dios Blanco de los cristianos. Una lucha religiosa que sobrevuela toda la novela y tensa a los personajes... hasta los inmortales se saben caducos.

Todo esta reflexión espiritual y todo el tema del doble está aderezado de una intriga densa, pero comprensible, largas y cruentas batallas, peleas, personajes complejos, amores condenados desde la primera visión, deseo, sensualidad, violencia, muertes, engaños se encuentra concentrados en poco más de 350 páginas (versión de bolsillo). Porque La espada rota pertenece a esa época en que las historias se sabían explicar con un estilo rápido, trabajado, nervudo y denso y en un solo volumen. Lo que Anderson despacha en tres capítulos con un estilo casi perfecto con el tono de la obra (de fuerte calado épico, con un lenguaje arcaizante, pero efectivo, con una gran seriedad en lo que expone), hoy en día ocuparía un volumen de seiscientas páginas donde casi todo suele ser relleno y repetición.

En La espada rota pasan muchas cosas y muy interesantes. Es una obra muy bien escrita y fundamental para los aficionados y amantes del género fantástico. Es entretenida, emocionantes y tiene algunas de las mejores batallas que he leído en mucho tiempo. Además de una historia de amor trágica como pocas y condenada como ninguna. Un mundo fantástico cruel, duro, inhumano y caduco. Una novela sobre la desaparición, el sacrificio y la sombra de cada ser humano.

Apasionante.


Otras opiniones del mismo libro:
El kraken
Fantasy mundo
La casa de Jarjacha
Homo libris

8 comentarios:

  1. Vaya, me has dejado con muchas ganas de hincarle el diente. Me gustan tus reseñas porque señalas tanto lo bueno como lo malo así como tus impresiones subjetivas, por eso me ha sorprendido un poco encontrarme con una que no tiene ningún punto negativo. Súmale a eso que me encanta el género y que me apetece ponerme a compararlo con Tolkien. Tengo que hacerme con él ya mismo! A ver si tengo suerte... Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. Eomoi, es que no tiene un punto negativo. Se podría decir que exige del lector ciertos conocimientos de mitología, pero eso no es culpa de la novela. Que hubiera preferido algo de sentido del humor, pero eso es cuestión personal. La novela es breve, es directa, es cruda... y pertenece a la vieja guardia de la novela fantástica. Si te gusta el lenguaje de Tolkien, creo que te gustará la novela de Anderson.

    No creo que te sea difícil toparte con la novela, está en la colección de bolsillo de Alianza (la 13 20), pero si tienes algún problema te la mando desde la librería.

    ResponderEliminar
  3. Y hasta yo, que no soy lectora de fantasía épica, me he apuntado este título. Ahora que estoy viendo las últimas novedades de este género me apetece degustar buenas lecturas a ver si esta me llama más y mejor.

    Desde que leí El anillo del Nibelungo Tolkien no fue lo mismo para mí y decidí no leerlo... Asíque tal vez pruebe con esta novela.

    ¡Saludos!!

    ResponderEliminar
  4. Me ha encantado tu reseña, y al igual que Eomoi tengo ganas de leerla, espero que por este lado del charco (México XD) la hayan publicado.

    Lo que mas me gusto es que es del estilo de Tolkien y UN SOLO LIBRO, estoy cansada de que prolonguen las historias sin razón (con sus determinadas excepciones). En fin, si me topo con él le daré la oportunidad.

    ResponderEliminar
  5. oh me encnataria leerlo! se ve bastante bien!

    ResponderEliminar
  6. Veritas, es un clásico de la novela de fantasía épica. Seria, dura, sobre héroes llenos de grandezas y miserias, con un lenguaje trabajado y, a momentos, difícil. Pero vale mucho la pena. Es una muy buena novela de fantasía. ¡Y en un volumen!

    Kika283, un volumen casi perfecto. Son los mismos temas de Tolkien, pero desde una perspectiva diferente. No es el mismo estilo. Anderson tenía el suyo y era muy particular. Muy recomendable. Mira en alguna biblioteca.

    Liz, pues adelante que el libro se lo merece. Por lo menos una ojeada.

    ResponderEliminar
  7. ¡Qué barbaridad! ¿Cómo que Tolkien apuesta por un marcado maniqueismo? El maniqueismo es el nombre que se da a la herejía cristiana que defiende la existencia de dos poderes (el bien y el mal) que en igualdad de condiciones luchas en equilibrio sin que ninguno venza nunca al otro. Dejando a parte el hecho de que Tolkien era un convencido católico y no representaría un mundo basado en una herejía, vamos a ver !El anillo es destruido¡ El mal es vencido por el bien, Sauron es destruido, el mal no sobrevive, el equilibrio no se mantiene porque no existe equilibrio. Por otro lado en el Silmalirion nos relatan el genesis del mundo de Tolkien, en este genesis dicen que al principio solo estaba Eru que era infinitamente bueno. Entonces si solo estaba el bien y no había mal ¿dónde está su Maniqueismo? no lo hay, luego el mal surge de la libertad que Eru otorga a sus criaturas, pero eso no es equilibrio entre Bien y Mal, Eru esta por encima de Morgoth. Finalmente Morgoth es desterrado por los otros Valar y encerrado en Thaldruin. NO HAY MANIQUEISMO EN TOLKIEN.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No utilizaba la palabra maniqueismo en su sentido religioso o fiolosófico refiriendome a la he"rejía cristiana, si no en su segunda aceptación del diccionario (ya sea el RAE o el WordReference) de:

      "Tendencia a interpretar la realidad sobre la base de una valoració dicotómica"

      y relacionándolo a una caracterización de personajes no especialmente compleja, elfos buenos vs. orcos malos. Buenos muy buenos, contra malos muy malos sin muchos matices de gris por medio lo que no es sorpendente ya que es propio de la épica (y ya sé que estoy reduciendo y con épica no solo me refiero al género fantástico si no que pienso en los cantares medievales). No se me hubiera ocurrido nunca relacionar a Tolkien con una herejía cristina. Además, si te fijas en la reseña hablo de los personajes, no del transfondo ético, filosófico o de creación del universo tolkiano. Me parece que esto ha sido una mal interpretación de lo que quería decir, seguramente porque no me he expresado bien.

      Un saludo y gracias por pasarte.

      Eliminar