Res no és real, David Gálvez, Les Males Herbes
Una novela extraordinaria.
En Campverd escriu per salvar les paraules, la seva missió es impedir que desapareixin. Li valen poer poder continuar relatant el dia a dia de la seva comunitat aïllada. Són gent senzilla, la seva vida gira al voltant dels grans camps de maduixes, on treballen i viuen, atrapats en una rutina aparentment arbritària i ignorants del món que existeix més enllà.
Res no és real es una excelente distopía que se emparenta a los clásicos del género, pero mantiene una entidad y una personalidad propia. La íntima odisea de Campverd hacia la conciencia de su realidad por medio del lenguaje es de una brillantez estilística incuestionable. El protagonista absoluto de esta novela es la lengua, el idioma, el lenguaje. El simple acto del protagonista de escribir su realidad diaria le abre un camino, a él y al lector, hacia la comprensión del mundo que lo rodea, de su propia condición y de las expetativas. El autor apuesta por el poder del lenguaje, de la escritura y la lectura, para despertar la reflexión, la crítica y la conciencia.
Todo esto apoyado en un uso excelente del idioma (por ejemplo, un uso inteligentísimo de un reducido vocabulario o estructuras sintácticas que a lo largo de la narración y coincidiendo con la concienciación del protagonista se va volviendo más complejo y libre), para construir un mundo inquietante y asfixiante que se desvela poco a poco al lector. Una sensación de desamparo ante un mundo de leyes arbitraria y crueldad sin explicaciones. El despertar de la conciencia del narrador es el descubrimiento de ese mundo por parte del lector.
Una excelente novela donde se habla y reflexiona sobre religión, ciencia, poder, la memoria y que acaba desvelándose como una gran historia del amor. Breve y concisa, y a la vez, enorme. Conciencia de lenguaje y estructura. Cargada de implicaciones y matices. Una novela para releer y descubrir un mundo nuevo. Una de las grandes novelas de la temporada.
Blog del autor: David Gálvez Casellas
Otras opiniones
El hombre spam, Talbot Torrance (seud. de Pablo García Naranjo), Tyrannosaurus Books
En un momento en el que las novelas de más de doscientas páginas se me antojan demasiado largas, recibo una novela breve, directa y contundente como El hombre spam con los brazos abiertos.
Jonás Tedheim malvive invadiendo la mente de los demás. Proyecta anuncios publicitarios directos al cerebro de todo aquel que no puede procurarse unas defensas psi. Es un hombre spam: un insecto más en las Torres de Nueva Ghana, la principal ciudad de un planeta colonial. Una ciudad adicta a héroes muertos, drogas nuevas, polución, obreros probeta y la esperanza de un futuro más allá de los eternos turnos de trabajo.
Jonás Tedheim no siempre fue así. Hubo un tiempo en que fue un Lobo, un miembro de la Brigada Logan. Fue el rey en un mundo de símbolos decadentes. Un tiempo brutal y glorioso enterrado entre recuerdos implantados. Pero alguien ha puesto precio a su recalentada cabeza. Alguien susurra su nombre en cada esquina de las Torres. El pasado siempre vuelve con la promesa de muerte, traición y violencia. Asesinos con máscaras kabuki han jurado vengarse.
Los hijos de Rohmer van a por él.
Ciencia ficción que bebe del ciberpunk y de la novela negra de raíces clásicas. Una ambientación espectacular que por momentos se come al propio argumento y a los personajes. El lector siente, vive, respira y se pasea por esa pesadilla futurista llamada Nueva Ghana donde miles de seres humanos viven hacinados sin intimidad. Un mundo de consumidores / productores con su propio lenguaje (se pilla rápido y resulta muy sencillo adoptarlo). El autor consigue que un mundo completamente nuevo sea muy accesible al lector atento. Y en este entorno se desarrolla una clásica historia de traiciones e intento de redención con un protagonista alejado de los estándares del héroe.
Un buen protagonista rodeado de una interesante galería de personajes secundarios (gran idea la de los Hijos de Rohmer). Un antihéroe en busca de algo parecido a una redención que se confunde con la más básica supervivencia. Un estilo claro, directo, con un buen uso de los diálogos y un gran dominio de los mecanismos de la ambientación. Lo repito, Nueva Ghana como marco vivo. Al acabar el libro, el lector quiere más historias de esta ciudad.
Una novela sencilla, directa, contundente, rápida y muy entretenida. Quizá le hubiera venido bien un poco más de desarrollo en alguna de sus partes, pero se agradece mucho la apuesta del autor por una novela corta, pero bien construida. Además, esta repleta de guiños al género que divierten al lector, pero no condicionan su lectura.
Blog del autor: El blog de Ternin
Otras opiniones
a esto se le llama cura de desintoxicación, jejeje, muy interesantes los dos además :)
ResponderEliminarun abrazote!!!
Lo necesitaba, Mara. Novelas buenas, cortas y al grano.
EliminarMuchas gracias por la reseña. Me alegra que te haya gustado.
ResponderEliminarGracias a ti por la novela. La he disfrutado muchísimo.
Eliminaroh te estás desquitando en grande señorito :)
ResponderEliminarClaro, ahora solo cosas cortas y buenas.
EliminarRes no és real, David Gálvez, Les Males Herbes ¿va a ser traducida?.
ResponderEliminarEspero que sí, la verdad, aunque de momento no hay noticia. Es una novela que merece un público muy amplio.
EliminarYo ando igual que tu, sólo quiero novelas cortas estos días. Y me alegra que estés leyendo cosas buenas y nos lo cuentes. Me llaman la atención los dos y ojalá pueda leerlos.
ResponderEliminarSaludos.
Más de trescientas páginas se me hacen cuesta arriba. Y en juvenil, por ejemplo, parece que nada baja de las cuatrocientas. Y me da una pereza todo...
EliminarHa muerto Terry Pratchett... :(
ResponderEliminarHan pasado días, pero aun estoy tocado... ha sido algo muy doloroso.
EliminarGracias por enlazar nuestra reseña, Jorge.
ResponderEliminarSaludos
Gracias a vosotros por hacerla.
EliminarRes no és real parece interesante, y no conocía al autor. Intentaré echarle una ojeada a ver que tal. Gracias por seguir con el blog, Jorge, y espero que tu proceso de "desintoxicación" vaya a mejor. ¡Un saludo!
ResponderEliminar